" El estrès en las organizaciones "

" Situaciones emocionalmente criticas en las empresas "

Seminario dictado en el Instituto PyME de Banco Ciudad.

18 de mayo de 2010

La mediocridad en las democracias actuales .

La decadencia moral de las clases gobernantes quebranta las democracias.
Creemos que alentar un proceso basado en un individualismo responsable, posibilitaría poner la democracia a favor de una mejor organización de la vida colectiva

Dice Lipovesky al respecto:
“ ….el crepúsculo del deber quebranta las democracias…”
“….en el lugar de la moral del civismo, tenemos el culto de la esfera privada y la indiferencia hacia la cosa publica, el “dinero todopoderoso” y la “democratización” de la corrupción.”
Inferimos que este problema ético esta originado por la decadencia moral que se instala a partir de la modificación de ideales, basados en creencias firmes de respeto al derecho de los hombres. La perdida del sentido del deber, nos pone frente a este “utilitarismo” contra idealismo. En la que las clases dirigentes se apoderan del poder por medio del monopolio de estado. Y, desde ese espacio de poder, matan los sueños individuales y colectivos, sometiendo a los pueblos a una mediocridad que se instala como sistema. Advenedizos y pillos se apoderan de los destinos de la Nación y los ciudadanos adormecen sus ansias de libertad y realización personal. Administran indiscriminadamente los bienes colectivos, en su propio beneficio, procurando que las riquezas materiales, queden en mano de los pocos que sirven a esta “mediocracia”.
Ningún funcionario, sindicalista, político o economista parece estar obligado a dar respuesta de nada a nadie. Nadie es contestatario de las necesidades clamadas por el pueblo. Las promesas vanas están a la orden del día. La indefensión es absoluta.
J. Ingenieros nos habla de estos “personajes” que solamente buscan satisfacer sus apetitos y ambiciones. Vulgares fervorosos, adeptos a la militancia cómplice, que conspira, en contra de los ideales de libertad e independencia; de nobleza y solidaridad de dignidad e igualdad.
No hay cabida en estas sociedades “mediocrizadas” para filósofos, libres pensadores, artistas independientes, ciudadanos que por medio de sus ideas y esfuerzos pueda acceder a actos que nos hablen de libertad, igualdad y solidaridad. Las personas espirituales y los genios que en toda generación florecen, en estas condiciones solamente pueden subyugarse al poder de turno o bien convertirse en muertos sociales.
Podría pensarse que esta hipótesis tiene significado solamente para los países emergentes, pero no es así. El País que brilla por su poderío y hace gala de su practica democrática, intentando iluminar con su vasta sabiduría a los pobres y hambrientos del Mundo, promoviendo una única economía global. Basados en valores de solidaridad y asistencia, absolutizando estos valores, logran generar más desocupación, miseria, y se avasallan derechos humanos incompatibles con la calidad de vida pregonada. En su propio País, referente del Mundo Occidental, se padece desocupación, los índices de pobreza mayores del mundo industrializado, mortandad infantil por enfermedades fácilmente curables. Todos esto es posible por medio de mantener aisladas las políticas de las verdaderas políticas, si se hace esto, se posee la certeza de que se pueden tener formas democráticas que no moficaran nada. Así lo manifiesta Noam Chomsky, (Clarín 16.8.94) con el que adhiero.
Nuestra opción fundamental es la vida, y la salvaguarda de ésta garantizada por dos imperativos fundamentales “no matar” – “no robar”. El no matar protege la vida en si misma, en todas sus dimensiones. Pero, mata no solo quien quita la vida biológica sino quien atenta contra la libertad, el amor, la vocación, el trabajo, la educación, el alimento, ya sea quitando a alguien esos bienes vitales o impidiendo su goce o acceso. Quien roba a alguien los bienes necesarios para vivir, lo esta matando.
Si. . .J. Ingeniero, los llama puntualmente “ vividores”, pillos, bandoleros, políticos sin vergüenza, todos ellos especialistas en el arte de la mentira.
Se define a la Democracia: como el gobierno en el que el pueblo ejerce la soberanía.
Y se entiende por Soberanía: la que corresponde al pueblo, de quien emanan todos los poderes del estado.
Esta era posmoralista de las democracias, como la menciona Lipovesky, pone en peligro esta forma de gobierno, a la Nación toda. Siendo sus ciudadanos rehenes de un sistema perverso e irresponsable.
Estamos en manos de irresponsables; dice Socarras… respecto de la responsabilidad: “A la responsabilidad personal compete asegurar la felicidad propia y ajena – la persona responsable es de fiar – No adelanta promesas vanas – “
Dice de las épocas actuales: la administración publica no garantiza nada, ni repara yerros, ni brinda confianza. Los servicios públicos no se brindan, producto de los funcionarios corruptos que incumplen sus obligaciones.
El destino del hombre se transforma en el contribuir al crecimiento del sistema económico, a la acumulación de capital, no ya para lograr la propia felicidad o salvación, sino como un fin ultimo. El hombre se convierte en un engranaje importante si posee mucho capital, insignificante si carece de él, pero, en todos los casos continua siendo un engranaje destinado a servir propósitos que le son exteriores. Desde este punto de vista de Fromm, entiendo que los hombres inmersos en un sistema democrático/ mediocratizado, no dejan de ser servidores de intereses económicos que le llevan a dejar de lado sus valores mas nobles, permitiendo que su opción fundamental, tal vez, sea la de que para tener y ser poderoso todo es licito, aunque finalmente termine siendo un sirviente del sistema que él mismo alimenta.
Los valores caritativos y humanitarios pueden despertar una fuerte simpatía pero quedan muy atrás en relación con la superficie que ocupan, el himno al ego y los estímulos al consumo (From)
Un sistema o proceso se agota y otro debe de remplazarlo, no todo esta perdido, agotado. Por el contrario, esta todo por hacerse, pero, de una manera distinta, con bases en valores mas nobles y humanistas.. Dice Lipovesky al respecto:
“…cuando se apaga la religión del deber, no asistimos a la decadencia generalizada de todas las virtudes, sino a la yuxtaposición de un proceso desorganizador y de un proceso de reorganización ético que se establece a partir de normas individuialistas”

En este contexto creemos que como ciudadanos, individuos que integramos esta sociedad, como personas humanas, podríamos preguntarnos ¿qué podemos hacer para modificar esto?
El intento por internalizar que la vida es el único absoluto, y que todos los demás valores son relativos, posibilitaría el comienzo de una nueva moral.
Es momento en que nos reconozcamos responsables de nuestra vida y el futuro de la humanidad. La ética de la responsabilidad no le da la espalda a los valores individualistas, expresa la extenuación de la cultura del “todo está permitido” y simultáneamente la exigencia de fijar limites y umbrales, de organizar socialmente el proceso de libre posesión de uno mismo, siendo “actor humano” , consciente de que cada elección individual conlleva una responsabilidad hacia “otro”
Fortalecer la Democracia, y sus principios básicos, a saber:
- La creencia de que la vida humana, la felicidad y el bienestar han de ser evaluadas por encima de las cosas.
- la aseveración de que el hombre es dueño de su propio destino, tiene el derecho de controlarlo en sus propios intereses en forma personal
- la determinación de que la dignidad y el valor de cada persona deberán ser respetados en todo tiempo y en cualquier circunstancia.
- El supuesto del derecho a la libertad individual; el reconocimiento del derecho de cada persona a pensar y hablar libremente.
Es solamente posible si se los internaliza de tal manera, individual y colectivamente, en toda la línea de la conducta humana, de manera que los individuos enquistados en el poder se vean obligados a replantear su postura ética frente a estos cambios instalados en la mayoría de los ciudadanos, generando una nueva regulación social de los valores morales.
Es decir la participación activa que mueva a la resignificacion de los valores de las clases dirigentes.
Dice Gianni Vattimo al respecto (Clarín 4.2.01): si quiero vivir en un mundo que garantice mi libertad debo exponerme al riesgo de vivir en una sociedad democrática, donde las leyes son hechas con el consenso argumentado de todos. Puedo reducir el riesgo de dejar que ganen los locos ayudando al desarrollo de la cultura colectiva, con inversiones en la escuela publica, participando en la discusión publica y evitando que alguien pueda imponer a todos sus ideas.
Un objetivo esencial seria permitir que florezca un individuo útil al mundo, maximizador de sus posibilidades y potenciales, adaptado a la conquista racional del porvenir, para de esta forma poder dar respuesta, desde un Democracia ejercida con justicia y vocación de servicio, a la desocupación, el analfabetismo, la inseguridad jurídica, las drogas, y todos los temas desatendidos, o atendidos espuriamente, en esta Democracia/Mediocre.
Hacernos cargo requiere compromiso, desde tu ámbito, te invito a que lo practiques.
Desde nuestra Institución trabajaremos desde el tejido de la red social, en este proceso que promocione una nueva conciencia ética. Como especialistas en ayuda, ayudaremos a que las personas y organizaciones. Para que puedan repensarse en sociedad, sin influir, directivamente, desde lo que “yo creo que debe ser”; en contacto con un otro, en un sistema mas justo y equitativo, donde se garanticen los derechos inalienables a los que todo ciudadano debe acceder. Para de esta manera y en un contexto mas saludable poder pensar en la autorrealización, como meta máxima de vida.
La aceptación incondicional aquí jugaría un papel determinante en nuestra actividad.
Podemos llegar a acuerdos o a desacuerdos con los valores encarnados de los corruptos, y , creemos que este seria nuestro desafío ético.
La lucha interna entre el deber y la responsabilidad a la sociedad se confrontaría con el deber y la responsabilidad, que propone la organización
Si los criterios del corrupto se contraponen con nuestros patrones y creencias, deberemos reconocer nuestra limitación, y que no podemos trabajar con esa persona y/o empresa u organización.
Si la dignidad y valor de cada persona deberán ser respetados en todo tiempo y cualquier circunstancia, como dice Patterson, creo que una forma de proceder desde una actitud ética es aceptar esto y no intentar, bajo ningún aspecto, involucrarnos en un proceso con una persona u organización cuyos valores morales estén decididamente enfrentados a los nuestros.
Lo fundamental es ser participes activos consustanciados con los principios de la cultura Humana. Representada por el accionar justo y equitativo de oportunidades. Acceder a lo indispensable para vivir y desplegar desde ahí el vuelo de la realización personal y colectiva.
Integrarnos en entramados sociales, culturales y afectivos de forma tal que, mancomunadamente, podamos elaborar una nueva filosofía de vida. Mas cooperativa y corporativa.
No podemos pensar a las ciencias integradas si, anticipadamente, no integramos al ser humano y la Humanidad toda.

Jorge de Leon, Clr.

3 de mayo de 2010

COMO LLEGAR A VOLAR ALTO- 1994

Los seres humanos tenemos la capacidad de volar.
Si, podemos volar.
Solo tenemos que:
Proponernos, esto, con la firmeza necesaria.
Tener Fe en nosotros mismos.
Crear la adecuada ruta de acción.
Hacernos del conocimiento necesario.
Desearlo desde lo más profundo de nuestro corazón.
Intentarlo, más allá de los fracasos.
Generar una imagen mental de certeza.
Imponernos la negación del fracaso.
Aprender de nuestros errores.
Amar la vida intensamente.
Saber que somos hacedores de “milagros”.
Entender a los que no pueden,
Saber que somos distintos.
Dejar de lado las excusas.
No escuchar a los pesimistas.
Generar el entusiasmo necesario.
Apasionarnos con la idea.
Sentir el Éxito….y entonces….estaremos volando…muy…pero…muy alto.

Jorge de Leon